Prólogo y dedicatoria.Este es el primer capítulo de un trabajo literario que haremos en conjunto Yanso y yo, que si bien nace de largas conversaciones y reflexiones en las típicas rondas de vodka del bajo mundo, tiene un trasfondo íntimamente relacionado al visionario y profeta Dante Alighieri y su obra la Divina Comedia, sobre la cual llegamos a la conclusión de que sin dudas hacía alusión a la República Dominicana en el Siglo XX y XXI, en especial a la ciudad de Santo Domingo de Guzmán. Han pasado demasiadas vodkas, vinos, cervezas, whiskeys, tequilas y hasta algunos osados que la hicieron con ginebra, como para recordar quien fue el primer grande que dijo “este es el infierno”, pero hermano... quien sea que fuera, porque el alcohol no nos permite recordar... esto es para ti.
Capítulo I: El Primer Anillo (Limbo).Dícese de quien “vive en el limbo”, como una persona despistada e ilusa a quien en su lápida en el día de su muerte le escribirán: “El compró tierra en Marte y dijo que tenía una novia que se fue a ‘estudiar’ a España y no le pegó los cuernos”.
Entre otra de las manifestaciones conocidas están clásicos como:
“Yo lo voy a enderezar para que el no siga siendo tan vagabundo en la calle.”
“Mi novia y su ex son sólo amigos y no va a pasar nada.”
“El me dijo que iba a dejar a su esposa para estar conmigo.”
“Ella se vino.”
“Mi esposa se la pasa todo el tiempo en su casa tranquila.”
Sin embargo, la que nos atañe en este primer capítulo es algo que más o menos va como “este es el mejor país del mundo, yo no me mudo ni matao’”.
En un principio yo dudaba que existiera este tipo de condenados en el infierno, porque no hay dudas que el Primer Anillo del Infierno de Guzmán es el más subrepticio y menos visible de todos. Pero esto fue hasta que en cuestión de horas me tropecé con toda una senda de pecadores de este tipo, y descubrí ese sitio que sólo mencionaban las leyendas bíblicas del medioevo... el Limbo.
Existen delirantes que tienen la osadía de decir a todo pulmón que de aquí no se mudan, porque aquí hay de todo y se puede hacer de todo, y que este es el mejor país del mundo porque es su país y que aunque no sea perfecto, está bien... ok ................. ESTE en ciertas partes de su anatomía no estaría perfecto, ahora... estaría bien?
Por lo general este tipo de personas están en una clase acomodada porque o los padres le mantienen de forma directa o indirecta o está enganchado en el gobierno o su familia lo “ayuda” desde New York, o es un ápero, o es un narcotraficante, o es un loco.
El Primer Anillo no es tan maléfico per se, puesto que está reservado para muchos ilustres que no obstante estar dentro de las arcas ardientes del infierno, en cierta medida viven la ilusión de que lo han logrado, y no es un martirio eterno... lo curioso del Infierno sin embargo, es que este es como un casino... LA CASA SIEMPRE GANA.
“La playa está a media hora, y si quiero me voy a las mejores playas del mundo en el Este”:
Camino a la playa se te atraviesa un camión Mack haciendo cortes de pastelitos en la carretera cualsifuese un motoconcho, o tuviste la dicha de no fijarte del hoyo en medio de la curva en la pista y luego de darle un besito al murito, terminas bañándote en el mar antes de lo que esperabas. Y si sobrevives la ida... para retornar lo tienes que hacer a lo oscuro, porque no hay luces en la puta carretera, y no basta con que lo tengas que hacer a lo oscuro, lo tienes que hacer ciego, porque todos los mmgvos del carril de al lado vienen con las luces altas, y todavía a esas horas sigue el camión haciendo cortes de pastelitos.
Si tienes la dicha de llegar a la playa y te la juegas en Boca Chica o Juan Dolio, se te sienta al lado un pana con un bachatón y su pistola bebiendo Cutty Sark, en la arena debes tener cuidado de no tropezarte con pampers usados, y dentro del agua debes tratar de mantener tu distancia del panita que se está bañando en calzoncillos y que le está celebrando a uno de sus hijos de 3 años que se sacó el ripio delante de todo el mundo y comenzó a mearse en el agua.
“Aquí se hace coro, se bebe donde sea, la gente es un tripeo... el dominicano es siempre buena onda”.
Pero dan las 12 de domingo a jueves o las 2 los viernes y sábados donde te sacan de los sitios a patadas o te ponen Topo Gigio, y ya no te venden bebidas alcohólica. La policía te para por cometer el grave delito de andar en la calle y te lleva al destacamento sin derecho a llamada porque le salió una espinilla en un glúteo o porque te pusiste a “razonar sobre tus derechos”.
El dominicano es tan buena onda que el conductor de adelante detiene todo el tráfico porque el estima necesario destinar tiempo a echarle maldiciones a un imbécil que casi se lo lleva por estar de loco, o el motorista que está al lado tuyo te saca una pistola porque le gustó tu reloj.
Y ni hablar de la cizaña en este patio donde todo el mundo sabe y quiere saber todo de todo el mundo.
“Toy pegao con el gobierno, aquí yo soy alguien y afuera lo que soy es otro inmigrante y to eto ta perfecto”.
Hasta que pasan 4 años, y te ponen a brincar a uno de los otros ocho anillos del Infierno de Guzmán y comienzas a pedir cacao.
Muchos de estos pecadores se abrazan a la ilusión por el contexto del momento, pero tarde o temprano... siempre son juzgados y castigados por Minos el hijo de Zeus y terminan atrapados en alguno de los otros anillos del infierno.
Y no es por ser pesimistas... es que de ilusiones y sueños están hechas las escaleras en espiral del Infierno de Guzmán.