jueves, 19 de abril de 2007

Citas/Comentarios/Frases Celebres No.2

hochy says: yo no hago coro con rokera

Dante, el chico mal sano (bipolar & antisocial).... says: eehehhehee, el masjevito

hochy says: no... como asi

hochy says: e casera que me gustan

hochy says: de la que no chipean


a lo que Miguel responde:

Mig.-Waving from such great heights.. says: grave error, lo que pasa e que no e lo mimo chipiar con marylin manson que chipiar con el buki o con el combo de Don Omar...

miércoles, 18 de abril de 2007

Los Menores

Después de un breve receso y de darme tiempo para digerir toda la información y sabiduría de mis colegas culpables del colectivo social denominado Bajo-Mundo, he decido, a petición de un fiel lector de este (aclamado y leído por decenas de miles) blog, hacer un humilde aporte.

De manera introductoria debo aclarar, de la misma manera que lo hace el Sr. AldoCoraje, que aquí simplemente vierto los pensamientos y opiniones que cruzan por mi cabecita durante las largas horas de insomnio y que bajo ninguna circunstancia es de mi interes agredir, señalar y/o/u ofender a los lectores. Ahora bien, si se da este caso, que alguno de ustedes se sienta aludido por mi opinión y visión, permitame aconsejarle que lea y ejecute la Recomendación #1 de este (aclamado y leído por decenas de miles) blog, y como dice nuestro asesor legal en Sr. Orly deje de robarme el tan preciado oxigeno que respiro.

Pues aclarado esto, vamos al grano. Así mismo como el macho cabrio busca y encuentra satisfacción tanto carnal como emocional cazando a la Menol, la mujer en algún punto de su vida siente la necesidad y el deseo de agregar a su curriculum un hombre mas joven que ella.



Las necesidades a satisfacer difieren para ambos casos, ya anteriormente se ilustraron sobre lo que busca el hombre con la menol (si no leyó este post lealo ahora antes de continuar con este) y ahora recae sobre mis hombros ilustrarles sobre que busca la mujer con un menol.

Pues amigo lector es simple, no tengo que recordarle ni aclararle que la hembrita es un ente sumamente emocional y controlador (aunque se lo disfraze), por mas despegada, loca, bipolar, hippie, metalica o gropie que sea, siempre confunde o borra la delgada linea roja que existe entre los sentimientos y el resto de las cosas, siempre salpica la cotidianidad con el sentir y con su afición a la novela de la vida. Entonces, encuentra en el menol a un macho cabrio en desarrollo, con menos experiencia que ella en el tema del amor, los sentimientos y la lujuria y por ende asume y entiende que puede tomar, mantener, emplear y en la mayoría de los casos abusar del poder que la experiencia le concede.

Cuando hablo de un menol me refiero a aquel jovencito que ronda entre los 18 y 23 años o sobre algún que otro adolescente super desarrollado y con un tigueraje potente que anda entre los 16 y los 20. Y cuando hablo de una mujer adulta me refiero a todas aquellas que pasaron de 25 (que son jovenes pero estan in the edge de la segunda etapa, haciendo sus pinitos en las tercera).

Para satisfacción personal, a la mujer le gusta sentirse benerada, amada, querida, respetada y sobre todo sentir que es la ama en la cama (todo esto forma parte de la novela). Cuando nos enredamos con un macho semental mayor que nosotras, encontramos el camino hecho en cuanto a sexo se refiere, ya el tipo (si aplica el caso y no es un bolsón baboso) tiene su experiencia, conoce sobre los trucos y le anda juyendo a la tan deliciosa sopa e´panties. El menol no, tiene una sed de conocimiento tan grande y fuerte que sera capaz de dejarnos guiarles por el camino del placer con los ojos vendados. Nos permitirá darle su sopita en la boquita y colocarles sus hilitos en las muñecas para manejarlos como marionetas a nuestro antojo.



Adicional a esto esta la resistencia, no es lo mismo un borrachon de 28 años, que ha pasao mas mala noche que una recién parida, que llega un estilo de vida alocado y hippie, con pocas horas de sueño, muy poco ejercicio, fumador compulsivo y casi apellido Brugal por todo el romo que se ha bebido, que un jovencito de 20, que apenas tendría de uso en el mercado algunos 4 o 5 años, a fumado menos, ha bebido menos, se ha trasnochado menos y normalmente en esa edad aun encuentra placer practicando deportes, por esto su resistencia física es mayor y puede durar mas tiempo en carretera, aunque tenga que hacer varias paradas antes de llevarnos al destino, me imagino que saben a lo que me refiero, hablo de cantidad y calidad.



No obstante las largas horas de placer y enseñanza que podamos disfrutar con el aun bien formado y sin vellos en el pecho menol, debemos tener en cuenta que podríamos caer en una relación de tipo 5: la Babysitter y que el apego emocional al que este puede llegar podria facilmente sofocarnos. Además algunos de ellos aun tienen el drama programado y podrían, a cambio de su resistencia, demandar cierta energía emocional que podríamos no estar preparadas para dar y agobiarnos con sus problemas que ya a nuestra altura del juego nos parecerán estupideces y niñadas.

Además si usted es una lectora que esta en su tercera etapa o entrado en esta, también debe pensar en el futuro, por que por mas maduro que sea el muchacho no va a estar en la disposicion de tirarse arriba de gratis sus esquemas y conflictos y mucho menos estará en la condición de darle apoyo monetario (y con que fuerza, si ese niño lo mas seguro esta agobiado con sus examenes parciales y no tiene tiempo para el trabajo!!!!!!).



Ahora bien, si esta lista para la enseñanza, para preparar y dar por primera vez en su vida la sopa e´pantie, dar apoyo emocional, recibir y dar cariño, busquece un menolcito, adiestrelo a su antojo y disfrutelo, no importa que este ponga resistencia, esto sera solo al principio, por que después de dos helicópteros, par de actos de magia y par de trucos mas, creame que sera solo suyo!

martes, 17 de abril de 2007

Las Novelas (o fundamentos de cortejo)

Siguiendo con la línea reciente de temas sobre parejas que han tomado por asalto a este aclamado (por decenas de miles) blog, y luego de intensos debates del bajo mundo sobre el tema en particular, tengo el atrevimiento de abordar este relevante tema, el génesis mismo de la relación.

Los intercambios sociales entre entes individuales tienden a seguir patrones similares, sea su forma de comportarse, como lleva su cabello, sus hábitos de higiene, la música que escucha y hasta como usted inicia una relación casual o duradera con una persona del sexo opuesto.

Esto es así debido a la influencia social del todo sobre el yo, donde el todo no puede ser sin el individuo y el individuo no puede ser sin el todo. Pero en el particular que nos ocupa respecto de la iniciación de las relaciones, es la influencia neurálgica de la trabajadora de la casa (en el caso de personas de escasos recursos, la trabajadora es sustituible por la madre) y las películas de Disney lo que resulta relevante.

En la vida de la niña dominicana promedio, esta sólo llega a tener contacto y observar con lujos de detalles dos perspectivas de cómo es que se inician las relaciones. Las novelas a las que la trabajadora de la casa la somete cuando los padres no están ahí aprovechándose de que ella es la que manda quitándole sus muñequitos a la desconcertada niña; y las películas de Walt Disney que los padres le alquilan para que la niña se siente como un zombie frente a la televisión y no esté brincando y jodiendo en el medio.



No resulta casualidad que la mujer siempre desde que tiene memoria, “sueña de cómo será mi boda”. Porque la pobre lo único que ve es gente casándose en novelas mexicanas/venezolanas (las brasileñas no, porque a la trabajadora no le conviene que la niña empiece a preguntar porque le salen pelos a las mujeres ahí abajo) y en los muñequitos de Disney, depravándola de los placeres infantiles que produce el cazar lagartos, jugar belluga, y la garata con puño.

Esto produce reacciones subconscientes que la niña va manifestando en su crecimiento, así es pues como esto define la formación de relaciones, para la desgracia de los hombres que son los desafortunados llamados a destapar ese frasco de drama...



Los hombres son seres sencillos realmente, como ser que creció matando pequeños animales a palos al fin. Y si fuese por uno, eso de cortejo, bailadera de lambada, llamadera y bulto se resumiera en cuatro palabras... “me lo dejas barato?” y ya este está listo para asumir la relación.

Con las mujeres en cambio... hay que hacerle su novela. Algunas tendrán el descaro de afirmar que eso es mentira que ellas no quieren show y novela y que “si me gusta el tipo ya, y no necesito que me hagan bulto”... pero por favor, asuma la realidad que su mente contaminada de novelas y Disney le quiere nublar.

He aquí algunas de las múltiples variedades de novelas que se montan:

“Súbete a mi moto”



Inspirado en el clásico de Menudo que sirvió de background a docenas de novelas de chamaquitos (antes que apareciera Rebelde Way), donde el jovencito padrote de la escuela rival iba en un motor a la escuela de la niñita popular, la montaba en su motor y se la llevaba, para el desaire de los chamaquitos que están detrás de ella... siempre sin despeinarse.

En la versión real, el chamaquito se escapa del colegio o aprovecha la salida, se monta en un carro público y se le pega un grajo, o se va corriendo a la escuela de la jovencita y coge el mismo grajo, y se para afuera del colegio a hacerle gracia a la chamaquita como todo un macho cabrío. La niña encantada por las destrezas de calle del panita cae en las redes de la novela. Un saludo a todo el que se graduó del Loyola antes del 2000, balsa de buitres todos.

“Amor Prohibido”



Sí, la novela que revivió a la bestia del Apocalipsis junto a “Mari Mar” la primera de las tres novelas caidísimas de la saga “Maria de la M”, que hizo Thalía antes que le vendieran el sueño de que ella puede cantar, y que es exactamente igual a todas las novelas desde siempre... tienen dos importantísimas vertientes de lo que hoy es el génesis de las relaciones.

La novela de la cenicienta, donde la mujer, que no necesariamente tiene que ser una barrial rullía, le meten los cuartos por los ojos sea mediante regalos, cenas caras y codeándose con el jetset, hasta hacerle creer que es toda una princesa rescatada, sueños de lujo y eterna algarabía... pero como puedes sacar a la muchacha del barrio (campo) y no el barrio (campo) de la muchacha, en el mejor de los casos la preñan tres veces y después la dejan por una mujer refinada y 10 años menor, justo cuando se convierte en “la loca esa”.

La novela de la amante, que según las novelas termina con la esposa cogiendo fuego, un sicario que ella contrató matándola o muerta en un accidente de tránsito dando paso a la felicidad eterna para el esposo y la amante, cuando en su versión real la mujer se convierte en el cuerno del pana, y en serio cree con todas sus convicciones de que el va a dejar a su esposa, un fenómeno tan común como un chofer de carro público con cerebro en las calles de Santo Domingo, termina en que la esposa la encuentra a ella, arma un reperpero y el esposo la suelta a las dos en banda y se busca una más joven.

“La Novela del Chico Malo”

La superefectiva novela, y una constante del bajo mundo, ya que aparentemente ser rockero desaliñao, antisocial y alcohólico es ser “chico malo” o algo... pero esta novela tiene su post guardado aparte...

“La Lambada”
Leer la recomendación #3 de este su blog que es auto-explicatorio realmente... y si no cogen la onda, hay muchos reggaetones haciendo odas a esta novela.

“La Novela en el Cortejo”

Es a la que los feos poco interesantes tenemos que recurrir para poder lograr algo, pintar desinterés, usar clásicos, hacer una película de Robert Redford, meternos a hippie y vender un sueño de romance desenfrenado con miraditas, palabritas y mucho alcohol cruzando por la mesa, dando la falsa impresión de ser hombres únicos y diferentes vendiendo novelas de Cortazar y poemas de Neruda, no obstante luego del “rendez vous” hacer un drive thru por el peque y pedir par de frías donde Baní y sentarnos a hablar disparates en el Consulado que luego terminan en este blog...

“El porno”

Para ninfómanas... una historia donde el dialogo y la trama no es más que un receso para que no se le entumezcan los órganos.

En resumen, excepto por las ninfómanas, las mujeres necesitan de su novela bien armada para entusiasmarse a una relación sea de 20 años como de 3 horas, el éxito del macho cabrío dependerá de que tan bien puede vender su novela.